El reloj biológico de la naturaleza

 Bandada de gorriones enamorando a la hembra

A pesar de que, quizás, el pasado martes fue el día más frío de los que llevamos de invierno, el reloj biológico de animales y vegetales me comunica que la explosiva Primavera ya está próxima.

Por primera vez he visto a un nutrido grupo de gorriones tratando de seducir a una pequeña hembra, también, al recoger algunos limones del árbol, me ha sorprendido encontrar varias flores de azahar entre sus ramas y en el patio, las macetas de claveles y gitanillas muestran varios capullos a punto de reventar de alegría,  prueba inequívoca de que, a pesar del frío accidental, la seductora y colorida estación está a nuestras puertas.

Desde que nos alejamos de la naturaleza y sustituimos sus ritmos vitales con los relojes y calendarios electrónicos, ni las horas son lo que son, ni mucho menos las estaciones, que van a su absoluto aire. ¡Menos mal que algunos seguimos teniendo el acierto de observar lo que se mueve a nuestro alrededor y valoramos los sentidos vitales de cuanto nos rodea! Si a los pájaros les ha llegado el “amor” y a los vegetales las flores, es una prueba irrefutable de que, a pesar del tardío frío que ha venido, la Primavera está a la vuelta de la esquina. ¡Bienvenida sea!

 Ramillete de azahar