Avenida de la Constitución, año 2004.
Aunque es una fotografía casi reciente, nos ha parecido
conveniente subirla para poder contrastar la avenida actual con la que hace 13
años: ¿notan alguna diferencia?
Partiendo del respeto al resto de las opiniones, la
avenida que aquí vemos sobresale por su hermosura y buena disposición. Contaba
con dos carriles por dirección, dos amplias aceras por las que se podía caminar
sin temor a ser atropellado, además de una maravillosa arboleda que te cobijaba
del calor en los meses de canícula, etc.
En el lado negativo sumaba el fuerte impacto ambiental que
recibían los monumentos de la zona y los peatones que por ella circulaban,
debido al significativo tráfico de automóviles que la recorría a todas horas
(más de 21.000 al día), por ello siempre nos pareció bien la idea de
peatonalizarla, pero no de la forma en que se ha ejecutado, destrozando el
importante arbolado que la cubría, convirtiéndola en el paraíso de bares y
cafeterías, desmadre de ciclistas, etc., y lo que es peor, el despilfarro
económico que ha supuesto, cuando se podía haber realizado lo mismo (o sea,
peatonalizar) prácticamente sin gastar un euro, sólo hubiera bastado cortar el
tráfico y habilitar un autobús eléctrico lanzadera que comunicara el Prado de
San Sebastián con el centro, así de fácil y económico, pero claro, si dejamos
el dinero guardado en el cajón sin darle movimiento ¿cómo van a hacer su agosto
los mangantes?
En fin, disfrutemos de esta hermosa imagen de hoy que para
eso se inventó la fotografía.
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